Ubicados bajo el contexto de las operaciones de pronto pago: Factoring o Confirming, la DIAN entendió la relevancia que tenía ayudar a crear un entorno adecuado para que estas se desarrollaran de la mejor forma y, sobre todo, bajo esquemas de control claros y transparentes para todos los que interactuan, se benefician y activamente participan de ellas. 

La apuesta que tenía en marcha la DIAN, desde que inició su piloto a final del año 2020, era lanzar en vivo el sistema RADIAN para mediados del 2021 y totalmente funcional para inicios del 2022. Sin embargo, y luego de poner a disposición del mercado proyectos de resolución, ha tenido que ajustar tuercas e ir mejorando y robusteciendo la propuesta de valor final. 

¿Por qué RADIAN?

Son varias las razones por las que nació la propuesta de crear el sistema RADIAN, acá referenciamos algunas sin que ello defina el total de las motivaciones: 

• Habilitar un espacio donde se tenga trazabilidad y control de las facturas descontadas. 
• Poner a disposición del mercado, la “hoja de vida” de la factura y así, dentro de otras razones, evitar se genere una multiple cesión de derechos con posibles fraudes de diferentes pagos sobre el mismo documento. 
• Aprovechar herramientas tecnológicas para que las operaciones de descuento de facturas sean más ágiles, dejen una huella en sistema y puedan dar continuidad a los ya avanzados esfuerzos asociados a la facturación electrónica. 
• Cimentar las bases para en un futuro abrir las puertas a un mercado en el que cualquier proveedor pueda encontrar, en un mismo espacio, diferentes alternativas o propuestas de financiación sobre una factura que necesita anticipar. 

Con el más reciente comunicado emitido por la DIAN, a finales de abril de este año, se precisa la expedición de Resolución 00085 de 2022 donde se especifican (junto con el Decreto 1154 de 2020) los lineamientos técnicos y de negocio deben tener en cuenta todos los que vayan a ser participes del sistema.

Asimismo, se especifica que a partir del próximo 13 de julio de 2022 “los compradores que adquieran bienes y/o servicios con pago a plazo, deben expedir el acuse de recibo de la factura de venta y el aviso de recibo de las mercancías y/o servicios de forma electrónica, transmitirlo para validación a la DIAN, utilizando, bien sea, el servicio de facturación Gratuito DIAN, su propio software, o el de un proveedor tecnológico.” 

Así las cosas, se espera finalmente que desde julio de 2022 RADIAN comience a marchar firme hacia la masiva estabilización, involucrando cada vez más proveedores, pagadores, fondeadores y aliados tecnológicos, y de esta forma la máxima de tener un país con “factoring social” de impacto se vuelva una realidad.