Cada nuevo periodo de gobierno es una oportunidad para los electores de implementar cambios en temas que no funcionan bien o que funcionan parcialmente bien. Para llevar a cabo estos cambios, se requieren propuestas de mejora, revisión de diferentes puntos de vista, análisis de las implicaciones y consecuencias de los cambios propuestos. La manera de implementar estos cambios es a través de reformas presentadas al poder legislativo con la intención de ser aprobadas.
Sin embargo, la mayoría de estas reformas son objeto de objeciones, reparos, modificaciones o incluso cambios profundos que implican volver a escribir el contenido, debatir y reconstruir. Este proceso es una parte fundamental del quehacer político y puede compararse con los proyectos de abastecimiento digital en las compañías.
Proyectos para el abastecimiento digital
En un principio, estos proyectos surgen como una necesidad de cambio en las compañías, patrocinados por alguien dispuesto a presentar una propuesta para una nueva forma de trabajo en el área de compras, con el objetivo de implementar prácticas más ágiles, digitales, trazables y transparentes, que permitan transformar la labor del comprador de lo transaccional a lo estratégico.
Fases para un proyecto de abastecimiento digital
Una vez que se tiene una idea general y se comienza con la implementación del proyecto, se realiza un diseño funcional de las necesidades y se presenta a las diferentes áreas de la compañía que actúan como “poder legislativo”, proporcionando insumos para tomar una decisión. En este proceso, surgen diferentes puntos de vista.
- El área de tecnología, si no es el promotor original del proyecto, puede sentir que el proyecto ataca sus políticas y hoja de ruta trazada para la transformación digital, convirtiéndose en un opositor acérrimo que suele ser difícil de convertir en adepto. Se requiere de tiempo, dedicación y esfuerzo para lograrlo.
- Otra área que, aunque es directamente beneficiada, puede ofrecer resistencia al cambio es el área de abastecimiento, ya que están acostumbrados a una forma de operar y a una comodidad que puede verse perjudicada con la implementación del proyecto. En este caso, es crucial involucrarlos en las etapas tempranas del proyecto para hacerlos partícipes y dueños de este.
- Las áreas de apoyo que no son directamente impactadas, pero que necesitan aprobar el proyecto, son importantes para tener una comunicación constante y fluida. Estas áreas incluyen riesgo operativo, legal, comunicaciones, recursos humanos, finanzas, planificación estratégica, ciberseguridad, entre otras.
En el proceso de implementación de proyectos de abastecimiento digital, se encuentran muchos promotores y detractores. Se necesita tener mucho tacto para vender el proyecto, entender cuándo es necesario realizar cambios estructurales al plan original, cuándo es el momento adecuado para presentarlo ante el comité directivo, cuáles son los principales interlocutores que deben ser incluidos y cuáles excluidos por el bien del proyecto.