Tener un buen manejo de tus finanzas personales es parte fundamental para tener una buena calidad de vida, esto refleja un buen manejo de los ingresos, gastos, ahorros o inversiones en la vida de una persona, si tienes un buen manejo de los recursos indiscutiblemente tendrás un mejor estilo de vida.
Pasos para aprender a manejar las finanzas personales
Aprender a manejar las finanzas personales puede ser una tarea difícil, por eso te compartimos algunos consejos que te facilitarán el proceso:
Nunca gastes tu dinero antes de tenerlo:
Es primordial contar con ingresos antes de generar gastos. Los ingresos que recibes se clasificaran en dos, por una parte, están los ingresos fijos, los cuales están constituidos por la cantidad de dinero que recibas mensualmente, posiblemente por actividades de operación (salarios), este será el dinero que dispondrás para los gastos de ahorro/inversión.
Por otra parte, están los ingresos extraordinarios (variables), no es seguro que se reciban todos los meses. Los de este tipo serán utilizados únicamente para actividades de ahorro e inversión, pueden provenir de ganancias ajenas a los ingresos fijos como por ejemplo la venta de algún artículo personal, propiedades, vehículos, actividades financieras, entre otros.
Debes saber lo que debes y lo que tienes:
La mayoría de las personas tienen gastos mensuales de los cuales no se pueden librar. Como lo pueden ser los pagos de las facturas de servicios públicos o privados, el pago de estas se convierte en una obligación fija mensual, es indispensable tener un presupuesto aproximado de los ingresos para el pago de estas obligaciones.
Es importante priorizar el pago de deudas, ya que pueden generar un valor adicional por intereses o cobros agregados que se deriven de estas obligaciones, tener claras estas deudas es vital para saber cuánto dinero dispones para usar en otras actividades. No obstante, es crucial no acumular deudas y ayudarse de mecanismos como el efecto bola de nieve para acabar de una manera practica con ellas.
Existirán otros gastos adicionales como alimentación, transporte, vivienda y entretenimiento de los cuales se sugiere llevar un control para saber cuánto dinero se gasta en cada uno de ellos.
Tener metas y propósitos de ahorro:
Se recomienda ahorrar mínimo el 10% de los ingresos, sin embargo, si la deducción de los gastos y obligaciones a los ingresos permite que el porcentaje de ahorro sea mayor se aconseja hacerlo, esto permitirá lograr nuestras metas de ahorro. A su vez es importante plantearse propósitos de ahorro según los intereses y las necesidades de cada persona, por ejemplo, un ahorro para vacaciones, vivienda, vehículo o ahorro mensual para el pago de impuestos, entre otros.
Lo anterior será un mecanismo que te ayudará con el manejo de tus finanzas, realizando un análisis de los gastos y aumentando tus ahorros según tus necesidades, lo que mejorará a través del tiempo la productividad y calidad de vida de cada persona.